
El auge de compras por plataformas extranjeras bajo regímenes de franquicia genera preocupación en rubros como vestimenta, calzado, juguetes y electrónica. Autoridades y cámaras empresariales analizan el impacto y posibles medidas.
El crecimiento sostenido de las compras al exterior por plataformas de comercio electrónico como Temu ha generado preocupación entre empresarios y autoridades en Uruguay. En marzo de 2024, el país registró un récord de 167.425 paquetes importados bajo regímenes especiales, superando incluso el pico registrado en diciembre del año pasado, según datos de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA).
Los rubros más afectados por este fenómeno son vestimenta, calzado, juguetes, decoración del hogar y artículos electrónicos. De acuerdo con estimaciones de la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay (CCSUy), el 21,6% de los envíos por franquicia correspondieron a vestimenta, seguidos por juguetes (11,8%), decoración del hogar (9,8%), calzado (9%) y electrónicos (8,9%).
La normativa vigente permite realizar hasta tres compras anuales sin impuestos por un valor máximo de US$ 200 y hasta 20 kilos por envío. Un segundo régimen permite compras por el mismo monto y peso, pero sin límite anual, a cambio del pago de un único tributo del 60% del valor de la compra.
Julio César Lestido, presidente de la CCSUy, señaló que “las condiciones en las que está compitiendo el comerciante tienen desventajas”, y advirtió que la tendencia de compras se mantendría alta durante los próximos meses. A su vez, la CCSUy estima que las compras bajo régimen de franquicia alcanzarían los US$ 180 millones para fines de 2025.
Herminio Castro, presidente de la Cámara de Importadores de Calzado y Textil (CICALTEX), expresó que “si las compras por Temu continúan en aumento, va a traer consecuencias devastadoras”. También indicó que “es imposible competir con Temu” dadas las diferencias en costos y condiciones del mercado local.
Desde la Cámara Uruguaya de Couriers (CUC), su presidente Carlos Bertelli explicó que se han iniciado conversaciones con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) con el objetivo de “encontrar una salida entre todos” y “simplificar los procesos de importación”. Entre los factores que afectan la competitividad local, se encuentran cargas tributarias que, en el caso de la vestimenta importada desde fuera del Mercosur, pueden implicar un sobrecargo de hasta el 81% sobre el precio original, según la asesora económica de la CCSUy, Ana Laura Fernández.
En el sector de jugueterías, se reportaron entre 30 y 40 cierres de locales en los últimos dos años, con una reducción significativa del personal. Según Gerwer, representante del sector, “la mayoría de las jugueterías están amparadas por el seguro de paro rotativo”.
El MEF, por su parte, sigue de cerca el fenómeno. Juan Labraga, director de la Asesoría de Política Comercial, dijo que “se está recabando información y analizándola en detalle”, señalando la necesidad de “ver que la competencia sea leal”. Labraga también recordó que Uruguay tiene compromisos asumidos en el marco del Acuerdo Marco sobre Comercio e Inversiones (TIFA) con Estados Unidos, que establece beneficios para compras web de hasta US$ 200 sin impuestos.
ABEL FLEITAS DÍAZ & CIA

